Gestión de personas

La transformación del liderazgo en pandemia: Entrevista a Leo Piccioli

<span id=hs_cos_wrapper_name class=hs_cos_wrapper hs_cos_wrapper_meta_field hs_cos_wrapper_type_text style= data-hs-cos-general-type=meta_field data-hs-cos-type=text La transformación del liderazgo en pandemia: Entrevista a Leo Piccioli

| 7 Minutos de lectura

| Publicación septiembre 10, 2020| Última actualización noviembre 14, 2022


Síguenos

En tiempos de pandemia y cuarentena, los líderes de las empresas  han tenido que buscar nuevas formas de liderar a través del trabajo remoto.

Por otro lado, el avance tecnológico y los cambios en los atributos que definen a un buen líder, se han transformado en un desafío para las organizaciones.

Como Buk, fuimos en busca de un  escritor y especialista en liderazgo y cambio tecnológico: Leo Piccioli.

Revisa la entrevista en la que conversamos sobre cómo la pandemia ha transformado el liderazgo en las generaciones y cómo las empresas se han adaptado al cambio tecnológico que el COVID- 19 impulsó.

También puedes ver la entrevista completa en el video al final de la página.

 

Tecnología y Liderazgo

¿Ha cambiado el liderazgo en estos tiempos de pandemia?

"Yo creo que lo único que hizo la pandemia fue acelerar algo que iba a suceder igualmente. Veníamos pasando a un liderazgo mucho más empático, soñador y visionario, en el que el líder nos invita a un mundo mejor y dice que nos sumemos y lo acompañemos a construir. 

Hubo un proceso de siglos en donde el liderazgo era inicialmente muy a partir de la fuerza o de un líder que era un rey, un político o un jefe, al que teníamos que respetar por el puesto que ocupaba.

De repente, ese jefe del siglo XX, al que yo siempre le he llamado Osvaldo, se ve forzado a cambiar. Osvaldo es buena persona, educado, nació en los 60, y es jefe de un call center. Toda su vida dijo que nunca iba a permitir que sus empleados trabajaran desde la casa, porque el ojo del dueño engorda el ganado. 

Vino la pandemia, la cuarentena, y no nos queda otra que trabajar desde casa.  Osvaldo se tiene que comer sus palabras y decir, 'mi equipo está mucho más contento y es más productivo así, remoto. Y no solo eso, yo también estoy mucho más contento de poder estar con mi familia'.

Lo que pasa al final, es que las instituciones que tanto nos protegen de muchas cosas, son mucho más lentas en cambiar. Una institución que es clave para nuestro público, es la empresa. La empresa, casi por definición, cuando tiene éxito, se abraza a ese éxito y dice 'no cambiemos. Llegamos hasta aquí vendiendo rollos de cámaras de fotos, sigamos vendiéndolos.'

Visto a largo plazo, esta cuarentena y pandemia es maravillosa. Hay cambios súper positivos en todo lo que es el liderazgo. El mundo nos está diciendo: 'no, muchachos. El cambio es permanente. No es que tengamos que cambiar y de vuelta estar planos'."

¿Cómo puede afrontar el líder jerárquico este cambio de mentalidad de las nuevas generaciones?

"Hay que tratar de que no se convierta en una batalla entre este líder antiguo y las nuevas generaciones, ya que en una batalla hay ganadores y perdedores. Se trata de entender que el mundo cambió, que el mundo es distinto.

Todos fuimos jóvenes, quisimos cambiar el mundo y hacerlo mejor. Sin embargo, en ese entonces no teníamos el poder para hacerlo. Fuimos creciendo, y fuimos ganando un poder que se volvió casi adictivo. Al ya tener este poder, nos fuimos haciendo adictos a este poder que nos permitía pagar la hipoteca, la escuela de nuestros hijos. Ya no podíamos vivir sin este poder, sin comer sushi ni pagar la hipoteca.

De repente, esa misma persona de 20 años que trabajó y tuvo éxito, se convirtió en una persona de 45 años con poder en una organización que ya no quiere cambiar el mundo, porque cambiar el mundo es un riesgo de perder el poder.  

Para mí, el problema es ese: cuando queremos cambiar el mundo no tenemos el poder, y cuando tenemos el poder dejamos de querer cambiar el mundo. El desafío es lograr ese abrazo intergeneracional.  El de 20 tiene que poner la energía para el cambio del mundo, mientras que el grande delega el poder, la experiencia. Es un trabajo en equipo. "

¿Qué cualidades debe tener un líder?

"Yo siempre les aconsejo tres cosas a los líderes: humildad, curiosidad y el largo plazo.

Humildad, porque tenemos que ser conscientes de nuestra ignorancia, ya que somos 700 mil millones de personas en el mundo y no lo sabemos todo; curiosidad, porque tenemos que querer saber más todos los días; y el largo plazo, que es esta idea de que todo lo que hace bien, sabe amargo, y todo lo que sabe dulce, te hace mal. Es como posponer el placer a futuro.

Si te fijas, tenemos el ejemplo de líderes que admiramos:  Mandela, Ghandi y Elon Mask.  Los tres querían cambiar el mundo, pero sabían que no lo podían hacer en corto plazo. Todos construyeron a largo plazo, con humildad y curiosidad.

Una persona que va a poner un restaurante en la esquina de un barrio, es un líder. Es alguien que va a mejorar el mundo a su escala. Es una escala más pequeña, pero que va a tener impacto en la vida de sus trabajadores, de sus comensales, de la gente que pase por ahí. Humildad, curiosidad y a largo plazo."

Finalmente, todos podemos ser líderes a diferentes escalas...

"Sí. En cada situación de la vida, siempre hay opciones.

¿Cómo se es líder? Actuando, liderando, inspirando. Imagínate esta situación: estás en la esquina de tu barrio y dices, 'el mundo sería mejor si alguien vendiera medias'. Vas, y comienzas a vender medias. Es una cuestión de acción, no de tamaño.

La gente me dice, 'no soporto a mi jefe'. Anda y ve cómo puedes liderarlo e instruirlo. Él también es persona, busca la forma de solucionarlo.

¿Podemos decir que gracias a la pandemia el mundo entero se vio envuelto en un cambio tecnológico? ¿cómo pueden abordar este cambio las empresas?

"Sí. La pandemia aceleró muchas cosas. No sé si decir gracias a la pandemia, porque eso significa que es un cambio positivo, y no sé cómo estarán los dueños de los cines en Santiago. ¿Alguien puede pensar en el dueño del cine? 

El problema que tenemos es que no sabemos manejar bien las matemáticas. Cuando alguien nos dijo que el coronavirus se contagia de manera exponencial, nosotros pensamos que la curva  iba a seguir creciendo de la misma manera. Pero crecimiento exponencial significa que explota, crece y sube la curva. 

Mi propuesta es entender que la vida no es lo que pasa entre cambio y cambio. La vida es el cambio. Tenemos que estar constantemente abrazando ese cambio y disfrutándolo."

¿Qué consejos les podrías dar a los líderes acerca de cómo liderar remotamente?

"Tenemos que entender que se amplió el espacio de trabajo, y que ya no es solo la oficina. De alguna manera, al ser el espacio de trabajo un espacio de convivencia, tenemos que empezar a experimentar con relacionarnos de otra manera. El líder puede meterse en espacios que antes no se hubiese metido.

Antes, cuando nos saludábamos un lunes en la mañana, la pregunta típica era '¿qué tal el fin de semana?'. Hoy tenemos que preguntar por el fin de semana de todos los familiares con los que viven nuestros colaboradores, incluso por las mascotas. 

Me encantaría dar una lista de qué cosas hay que hacer para liderar a través de teletrabajo, pero hay una sola para mí: la humildad. Sepamos que no hay reglas todavía, que es algo demasiado nuevo. Tenemos que preguntar, empatizar, encontrar la forma de reemplazar la palmadita en el hombro.

Por otro lado, yo creo que los horarios van a desaparecer. Los contratos deberían hacerse en base a objetivos y no en base de horarios."

Estás sacando un libro que está en preventa por Kindle y ya es best seller en Amazon: “El año en el que nos volvimos humanos”. Cuéntanos un poco sobre este libro.

"Es un libro que lo venía trabajando desde hace dos años. Se iba a llamar 'El siglo en el que nos volvimos humanos', pero todo esto me empujó a hacerlo rapidísimo. Lo apuré, lo cerré y le cambié el nombre. 

La industria editorial está súper desafiada, al igual que muchas otras industrias. Uno de los problemas que tiene la industria editorial es que se imprimen millones de libros que después se tiran a la basura, se queman. Me parece inadmisible, doloroso y vergonzoso.

¿Por qué se hace esto? Porque en el modelo de negocios de las editoriales se necesita imprimir, llevar los libros a las tiendas, y ponerlos delante del cliente para que el cliente los quiera comprar. Es más, mientras más pongas, más probable es que los compren, lo cual es psicológico pero no es bueno para el planeta.

Por eso decidí salir en una sola plataforma, y que si tengo éxito lo seguiré expandiendo. Este libro está solamente en Kindle, y si anda bien en Kindle expandiré a otras y eventualmente saldrá en papel. Mi anteúltimo libro 'Soy solo', ya está publicado por todos lados.

 


Revisa nuestra entrevista completa en el siguiente video:

¡Déjanos tu comentario!

Artículos relacionados